sábado, 15 de diciembre de 2012

Que es el biomagnetismo?

En los últimos años, las medicinas alternativas han tenido un auge importante y un impulso que ha marcado un parteaguas en los tratamientos médicos que se dan hoy en día. El Biomagnetismo Médico se considera una terapia alternativa puesto que no sigue los cánones de la medicina alopática científica, por lo tanto viene la pregunta obligada de: ¿De que se trata el Biomagnetismo Médico?

El Biomagnetismo es la terapia medicinal que por medio de la aplicación de imanes de una determinada fuerza y polaridades opuestas logra eliminar virus, bacterias, hongos y parásitos que son los causantes de la mayoría de las enfermedades que aquejan a la humanidad.


La técnica utilizada se trata principalmente de regular el pH (potencial hidrógeno) del cuerpo, lo que nos conlleva a la homeostasis del cuerpo, que en este caso se traduce como recuperación de la salud. Para lograr que el pH torne a neutro se utilizan imanes con determinada fuerza y polaridad en los puntos de resonancia para poder eliminar el medio de crecimiento de cualquier microorganismo patógeno, que se encuentre provocando algún malestar o síntoma en el paciente.


El Biomagnetismo es el estudio de los fenómenos bioenergéticos que producen los microorganismos dentro de los seres complejos o avanzados, ya que para su implantación, metabolismo y reproducción, se requieren alteraciones fundamentales del pH de los órganos que los soportan; dichas alteraciones son perfectamente mensurables y clasificables y de su manejo depende la restauración de la salud.

El Biomagnetismo Médico, estudia, detecta, clasifica, mide y corrige las alteraciones fundamentales del pH de los organismo humanos, aspecto muy diferente; porque aunque se dude, esta es una disciplina médico terapéutica, que desarrollada en toda su plenitud, puede ser la base de una medicina trascendental. Por supuesto no se desprecia lo estudiado y entendido de la medicina alopática, que a partir de los grandes pensadores griegos, no ha tenido una verdadera reforma y se conforma con repetir la metodología “científica” basada en el diagnóstico clínico, por medio de los signos y síntomas que refiera el paciente; clásicamente estudiada en las escuelas y avalada por los estudios de laboratorio y gabinete pero en donde ambos procedimientos son de orden estrictamente anatómico, químico o biológico, pocas veces estudiado desde el aspecto bioenergético.